En un mundo empresarial en constante evolución, la entrega de experiencias excepcionales a los consumidores es fundamental para el éxito de cualquier empresa. Conseguir una relación duradera y sólida con los clientes a través de la entrega de experiencias cada vez más eficaces e innovadoras es la clave para el crecimiento y la lealtad de las marcas. En este sentido, se reinventa con fuerza una técnica que lleva años transformando la forma en que diseñamos y experimentamos productos y servicios: el diseño biomimético.
Hoy desde ACTIONS, como especialistas en Customer Experience, profundizaremos en cómo la biomimética puede ayudarnos a mejorar nuestro CX.
¿En qué consiste?
El término «biomimético» se origina de las palabras griegas «bios», que significa vida, y «mimesis», que se traduce como imitar. Por lo tanto, el diseño Biomimético o biomimética, es la técnica que busca inspiración en la naturaleza para resolver problemas de diseño de manera innovadora a partir de su observación, estudio y análisis.
Imitar la vida, es decir, descubrir cómo los organismos han desarrollado soluciones para desafíos similares a los que enfrentamos en el diseño moderno para, posteriormente, aplicar esos principios naturales a los proyectos en curso.
A nuestro alrededor
Al igual que conocemos sobradamente cómo la biomecánica nos ha ayudado a entender la mecánica del movimiento del cuerpo humano, y diseñar soluciones a los problemas anatómicos y de movimiento, la biomimética también nos permite crear soluciones adaptadas en otras ramas de la ciencia, como la adaptación del diseño de un edificio inspirado en la estructura de un hueso de ave para ganar resistencia siendo una construcción más liviana, las alas de avión con formas aerodinámicas como las de los pájaros, los robots que se mueven como insectos, materiales ultrarresistentes hechos con sustancias similares a las de la telaraña, o sistemas de alerta oceánica basados en ultrasonidos como los que emiten los delfines.
Por qué es importante para la CX
La necesaria conexión de la CX entre las personas y las marcas se estrecha con la biomimética porque, al imitar la naturaleza, se aportan soluciones más eficientes y efectivas, perfeccionadas, que optimizan la interacción del usuario con los productos, que además incorporan elementos naturales que aumenta la conexión emocional, la sostenibilidad de la experiencia, y la sensibilidad ambiental. Todos estos factores generan empatía y afinidad, y satisfacción y la lealtad del cliente.
Aplicando el diseño Biomimético en la Experiencia del Cliente
La biomimética ha sido aplicada de forma exitosa a áreas que van desde las ciencias políticas y el diseño de un coche hasta la computación, y su aplicación en la CX involucra un proceso cuidadosamente planificado para lograr resultados óptimos. A continuación, repasaremos los pasos clave para lograrlo:
- Identificar el Problema: el primer paso implica definir el problema específico que se busca resolver en el diseño, por lo que es esencial comprender a fondo estos requisitos que pretendemos que aumenten la experiencia de los consumidores, ya sea para mejorar la eficiencia energética de una máquina, crear envases más sostenibles o aumentar la funcionalidad de un producto.
- Investigar la Naturaleza: una vez que se ha identificado el problema, se investiga cómo la naturaleza ha resuelto desafíos similares. Es fundamental explorar soluciones efectivas, eficientes y sostenibles que han evolucionado en la naturaleza, como el estudio de plantas, animales y ecosistemas.
- Adaptar la Solución: la solución inspirada en la naturaleza se adapta para cumplir con los requisitos específicos del diseño, y esto puede implicar ajustes para satisfacer necesidades de producción, ergonomía y estética.
- Evaluar la Solución: finalmente, se evalúa la solución desarrollada para asegurar su eficacia y eficiencia. Mediante pruebas de prototipos y pruebas de usuario, se realizan ajustes necesarios antes de su implementación final.
El velcro y los bañadores de competición son buenos ejemplos de la mejora de la experiencia y satisfacción del cliente con productos tecnológicamente avanzados a partir de la observación de cómo, en el primer caso, la flor de una planta como el cardo se adhiere a la ropa, o cómo la estructura hidrodinámica de la piel del tiburón aúna repelencia al agua y reducción de la fricción al máximo.
La adhesión y la repelencia al agua no son las únicas propiedades que se han estudiado. La ciencia se fija en la naturaleza para buscar respuestas a necesidades sanitarias, energéticas o para desarrollar materiales inteligentes y tejidos capaces de cambiar de estructura blanda a rígida en cuestión de segundos.
Observación, Innovación y Sostenibilidad
Aunque el diseño biomimético encuentra inspiración en la naturaleza, el papel esencial del ojo humano y la creatividad de los diseñadores son invaluables. La combinación de observación, innovación y sostenibilidad conlleva a soluciones excepcionales y alineadas con las tendencias actuales y futuras.
Mirando hacia el Futuro de las Experiencias
¿Has explorado el potencial del diseño biomimético en el campo de la CX? Con el crecimiento continuo de la tendencia hacia la sostenibilidad, esta técnica ofrece un enfoque poderoso para crear conexiones significativas entre las marcas y sus clientes. En el futuro cercano, los consumidores observarán un aumento en el uso de la biomimética para mejorar la eficacia de los productos y sistemas diseñados por el hombre a través de la aplicación de soluciones naturales desarrolladas por la evolución porque la naturaleza, con su vasto repertorio de soluciones, actúa como un recurso infinito para inspirar la innovación en la experiencia del cliente. Desde ACTIONS, ayudamos a las empresas a mejorar su CX, logrando múltiples beneficios en muchos campos diferentes. En este caso, el diseño biomimético no solo transforma la manera en que diseñamos, sino que también allana el camino hacia un futuro de experiencias más auténticas, eficientes y sostenibles.
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